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Historia

Suecia

En Suecia, en los primeros años de la década del 60, se concretó la decisión político-social de desinstitucionalizar los internados para los retardados mentales.  Se convirtió en una política social la de proveer servicios para asistir niñxs con retardo mental en su hogar y capacitar a los padres para éste fin, ya que si bien ellos sentían la necesidad de hacerlo, no contaban con las herramientas necesarias para dar éste tipo de respuestas.

El juego no solo estimularía el desarrollo de las diferentes funciones, sino que traería, consigo mismo, placer y compañía a la vida del niñx.

Cabe agregar, que en aquellos años, lxs niñxs debían esperar hasta la edad de cuatro años para recibir una atención especial en el jardín de infantes.  Los padres quedaban, exclusivamente, a expensas de sus posibilidades en estos importantes primeros años de vida.
En 1963, dos madres de niños con discapacidad, comenzaron a buscar maneras de ayudar a sus hijos.  Estas dos mujeres, Karin Stenland Junker y Evy Blid, sintieron que esperar hasta que un niñx tuviera cuatro años era demasiado tiempo.  Ellas estaban convencidas de lo determinante de los primeros años de vida para el desarrollo del niñx y que las estrategias de intervención deben ser parte de sus experiencias más tempranas.
Ambas madres estaban íntimamente concientes de la soledad y aislamiento que siente la familia de un niñ con discapacidad. Era importante para ellas hacer que el niño fuera parte de la sociedad tanto como fuera posible.
El juego fue la forma más natural de enlazar al niño y su familia. El juego no solo estimularía el desarrollo de las diferentes funciones, sino que traería, consigo mismo, placer y compañía a la vida del niño. Esta fue la raíz para la creación de Lekotek.
La primera Lekotek “Lekotek Blockhusudden” ( Lekotek en Blockhusudden), se abrió en 1963 en Estocolmo. Hoy las Lekotek están diseminadas a lo largo de Escandinavia. A través de los años se han expandido y desarrollado no solo en número, sino también en criterios y métodos que reflejan los cambios de la sociedad.
Hoy las Lekotek en Escandinavia ofrecen servicios para todos los niños con discapacidad, no solo niños con retardo mental.
Actualmente es un servicio requerido por el sistema de bienestar social, tanto de Suecia como de Noruega. Todas las familias con niños con necesidades especiales pueden optar por los servicios Lekotek. Las Lekotek son una parte esencial del equipo de profesionales que ofrecen servicios al niño y la familia.
El programa de intervención de Lekotek está enfocado a la inclusión a la familia, no al niño aislado. La tarea específica no es enseñar al niño nuevas destrezas específicas, a pesar de que este es un resultado natural del proceso. El objetivo de Lekotek, como ya lo dijéramos, es incluir al niño a la familia y de la familia a la sociedad a través del juego, jugando por el solo placer de jugar por jugar.
El jugar es la piedra basal. Los programas ofrecen a los padres sostén y herramientas para acompañar a sus hijos en su desarrollo a través del juego. Los juguetes son las llaves que activan la atención de las niñas y niños, pero es la calidad de la interacción humana lo que marca una diferencia crítica en el potencial infantil. lekotek promueve ese proceso interactivo.
El juego es la acción humanizante esencial.

Extraído del manual Lekotek, Evanston, lll., USA.

Estados Unidos de América

Sarah de Vicenttis y Sharon Draznin, profesionales de educación especial, norteamericanas, supieron de la existencia de Lekotek en una conferencia de educación en Escocia. Se sintieron tan movilizadas por esta propuesta que viajaron a Noruega para recibir entrenamiento en el método Lekotek. Bajo su supervisión, abrió sus puertas la primer Lekotek americana en Evanston, Illinois en 1980. Hoy muchas Lekotek han sido establecidas en todo Estados Unidos y han brindado servicio a cientos de familias. Las Lekotek norteamericanas mantienen fuertes lazos con las de Escandinavia y cooperan en el intercambio de información y recursos. El concepto adaptado de Lekotek se ha diseminado globalmente desde Argentina a Zambia. El crecimiento fenomenal de Lekotek resultó, en parte, debido a que su filosofía es práctica y simple de comprender. Lekotek se diferencia en una modalidad más humana y cuidadosa.

Extraído del Manual Lekotek, Evanston, lll., USA.

Argentina

El Centro Lekotek Argentina fue creado en el mes de Agosto de 1990 por iniciativa de una empresa (Citibank N. A.) en su programa “Hechos para los chicos”. Este convenio implicó un apoyo decreciente por parte de la empresa, haciendo de la asociación una entidad autónoma e independiente en el mediano y largo plazo.
Para poder poner en marcha el proyecto en nuestro país, Nilda Cosco, Beatriz Caba como miembros del equipo técnico de la asociación, Graciela Ortolá y María Laura de Barruel como representantes de la Comisión Directiva, participaron de una intensiva capacitación en Evanston, Estados Unidos, con el fin de incorporar su filosofía y método de trabajo. Ya en la Ciudad de Buenos Aires, emplazada en el barrio e Flores en la calle Tandil, inicia sus actividades con el Programa Familias, que trata de encuentros de juego con niñas y/o niños con discapacidad y sus familias, el que incluye préstamos de juegos y juguetes.
Desde una perspectiva histórica, los años 90, se caracterizaron por un fuerte crecimiento de sectores de la población en situación de pobreza e indigencia, lo que hizo que se resignificara la tarea de la asociación extendiendo sus servicios a toda niña, niño y su familia que se encontrara en situación de vulnerabilidad socioeconómica, trascendiendo sus fronteras iniciales de trabajo con la problemática de personas con discapacidad.
Esta característica de lekotek Argentina, asociada a la adaptación permanente de su tarea para dar respuesta a emergentes de nuestra comunidad, se constituye en una particularidad de la asociación. En esta línea de trabajo, en el transcurrir de sus años, se ha adaptado y sigue adaptándose activamente en torno a sus programas y proyectos.

Fundamentación

La importancia del Jugar en la Infancia
Entendemos la práctica del jugar como expresión fundante, necesaria y propia del ser humano. La misma se plantea como condición para la socialización, ya que a través de su práctica incorpora normas, valores y costumbres, propios del contexto en el que se desarrolla. El Jugar es generador de sentido, promoviendo la pertenencia y el desarrollo de la identidad, tanto individual como colectiva.

Es una actividad de fundamental importancia a lo largo de toda la vida, universal a todas las culturas. En el juego lxs niñxs se comprometen tomando una posición activa: imaginan, inventan, crean, conocen y actúan explorando con todos sus sentidos.

El juego es una ocasión para intervenir sobre el tiempo, haciendo de alquimistas, combinando dosis de pasado, presente y futuro. Es una expresión de rebeldía, de transformación, de dar vuelta lo establecido.

Jugando lxs niñxs diseñan escenarios lúdicos en los que construyen condiciones que les permiten abordar diversidad de situaciones. Despliegan sus capacidades, desarrollando habilidades que favorecen la generación de respuestas con elaboraciones progresivamente más complejas, en una dinámica de relación en la que pasan de una posición pasiva a otra activa y viceversa. Experiencia que permite ir desarrollando sus identidades, ya que su forma de jugar es única e irrepetible, marcando su singularidad, su estilo de juego, que como autorxs lxs identifica, determinada por la multiplicidad de vínculos que establezcan en el espacio familiar y comunitario, dentro de un marco ético y estético.

Las comunidades conformadas por diferentes grupos sociales, niños, niñas y jóvenes de la calle, comunidades rurales, poblaciones urbanas, etc; todos producen y desarrollan en sus relaciones formas lúdicas que les permiten transmitir y fortalecer modelos de relación.

Valorar las diferencias culturales reflejándolas en la habilitación de espacios lúdicos, implica respetar la identidad grupal y comunitaria, preservando la creación y el afianzamiento de normas y valores propios.

El juego es una actividad socializadora que facilita el acercamiento de los niños y niñas entre sí y con lxs adultxs participantes, generando espacios de intercambio y encuentro intergeneracionales.

El Juego es un idioma universal que permite atravesar las barreras idiomáticas, ideológicas, facilitando la inclusión de niños y niñas de diferentes culturas y con diferentes características y capacidades.

El jugar trae consigo mismo placer y disfrute para lxs niñxs transportándolxs a un tiempo y espacio único por ser sus creadores.

Al propiciar el juego por el placer del juego en sí mismo, Jugar por Jugar, da cuenta de la importancia de esta dimensión como expresión y modalidad a la que les inherente su carácter inútil, la ausencia de todo propósito de utilidad, juego porque juego, sin otro sentido que el placer que implica esa experiencia en sí misma.

Nuestro objetivo es alentar el Jugar por Jugar habilitando el surgimiento de lo espontáneo en el juego, experiencia que consideramos de valor constitutivo, ya que en ese mismo devenir del jugar se conjugan algo de lo ilusionado con algo de lo inesperado. Experiencia a la que le es inherente permanentes acomodaciones, promoviendo la posibilidad de una actitud plástica frente al contexto.

La posibilidad de desplegar el Juego espontáneo no determina que se instale “espontáneamente”, por el contrario, nos encontramos con el desafío que implica la complejidad de lo sencillo, subrayando lo esencial de generar las condiciones que habiliten el deseo, la pulsión de investigación.

Entendemos al juego espontáneo como:

Hoy más que nunca observamos la necesidad de reposicionar el Jugar por Jugar, de devolverle un lugar privilegiado en la infancia, o mejor aún, en las diferentes infancias.
Desde lekotek creamos diferentes espacios y dispositivos como la Juegoteca Barrial e Institucional, así también el Programa de Apertura de Dispositivos de Juegoteca, como propuestas que dan respuesta al Derecho a Jugar.